sábado, 1 de noviembre de 2014

Capítulo 1 : Vísperas de una tragedia

(Línea temporal de Evelyne)


“Mi vida es perfecta, tengo unos hijos maravillosos, tengo un marido excepcional, amo mi trabajo, nada podría arruinar éste momento” Pensaba Evelyne Gaitán, un año antes de su muerte, cuando todo parecía marchar de maravilla y su vida estaba alejada de la oscuridad y las penumbras que la aquejarían durante el fin de su existencia. Evelyne solía ser una mujer entregada a sus hijos, muy responsable y fiel a su marido… nunca en su vida había tenido que preocuparse por nada; desde pequeña era feliz… venía de una buena familia, con padres cariñosos donde lo tenía todo, donde nunca le hizo falta comida ni amor, donde entendió que en la vida había más que las cosas materiales y que la felicidad se obtenía dando y recibiendo cariño. En su adolescencia fue una joven intachable, nunca hizo nada fuera de lo debido y siempre procuró hacer el bien hacia los demás… quizá… esa juventud sin errores fue la que la llevó a cometer tantos en su futuro; A diferencia de cualquier otra persona Evelyne no aprendió de sus equivocaciones, puesto que rara vez cometía alguna.
Conoció a Alfred Linares en la Universidad… después de un tiempo de conocerse se enamoraron, se hicieron pareja, y tras compartir un par de años, se casaron.  De ese matrimonio nació su primer hijo que recibió el mismo nombre que su padre, Alfred Linares Gaitán, un niño de pelo negro y ojos cafés… el mismo niño que algunos años después cuando era mayor, retiraría de su nombre el apellido Gaitán y rechazaría a Evelyne como su madre, causando así una de las tantas catástrofes que se avecinarían la vida de esta.
 Dos años después del nacimiento de Alfred, vendría el segundo, una niña, igual de bella a su madre con ojos miel y pelo castaño cuyo nombre era Rosa Linares Gaitán. Una niña encantadora, que en unos años se convertiría en una joven muy emprendedora e inteligente, pero a quien el destino no le deparaba nada alentador.
Finalmente, 4 años después del nacimiento de Rosa, el último de los Linares Gaitán nacería, Rodrigo, un joven con un aspecto físico similar al de su padre, que en un futuro se convertiría en un muchacho alegre, pero que cuando se salía de sus casillas, perdía el control  y la cordura, llevándolo a cometer acciones con resultados fatales.
La familia era muy unida, Alfred respondía muy bien su labor como padre y los hijos rara vez causaban problemas; era un hogar ejemplar, donde reinaba el cariño y el amor, sin dejar a un lado las normas y el orden, por ésta razón, la convivencia familiar era maravillosa (O al menos eso aparentaban).

*****

Era el 13 de Diciembre de 2002, la familia estaba reunida en su hogar, alrededor de una gran cena, preparada por Alfred padre, todos reían y disfrutaban, pasando así una noche inolvidable. 
-          Me parece increíble que todos estemos aquí, juntos y felices, gracias familia; gracias madre por darme siempre tu cariño y tu ayuda; gracias Alfred, mi amor, por ser un esposo tan increíble… gracias Rosa, Al y Rodri  por hacer de mi la mujer más alegre del planeta, definitivamente mi vida no puede ser mejor.

“Tengo razón, definitivamente mi vida no puede ser mejor” se repitió Evelyne en su mente. Esa fue la última noche en la que tuvo un momento agradable con toda su familia, la última en la que vio sonreír a todas y cada una de las personas con las que ella vivía, fue la última, puesto que dos días después de ese 13 de Diciembre un integrante de dicho hogar… fallecería.   

jueves, 30 de octubre de 2014

Capítulo 0 - El principio y el final.

Capítulo 0: El principio y el Final.
Evelyne tomó aire, apartó sus manos del rostro y abrió los ojos. Vio a su esposo de pie frente a ella, tenía la cara demacrada y su expresión denotaba profundo dolo.  El hombre tenía el rostro cubierto de lágrimas que se deslizaban con delicadeza por sus mejillas, su postura estaba encorvada, su respiración agitada y sus manos temblaban. La mujer tardó en comprender lo que ocurría, sentía que el suelo se movía y la habitación daba vueltas. Su mirada estaba nublada y su equilibrio inestable. Tratando de mantener la compostura, se levantó del suelo y agitada corrió tambaleante en dirección a su marido. Él la observó y enseguida profirió un fuerte grito - ¡Aléjate Evelyne! – La mujer hizo caso omiso y continuó con su camino – ¡Alfred, por favor, no lo hagas! – exclamó alterada mientras procuraba no tropezar.

El hombre empuñaba en su mano derecha una pistola cargada. Alterado la levantó y apuntó con ella a su mujer - ¡No quiero hacerte daño Evelyne, te lo repito, aléjate! – Gritó molesto y tembloroso. Evelyne se detuvo, aún veía borroso, enfocó la mirada en Alfred y le dijo – Mi amor, sé que eres incapaz de hacerme algo, no digas estupideces y arroja esa pistola – La mujer caminó lentamente hacia su esposo; él no dejó en ningún momento de observarla, tras meditarlo rápidamente, dejó de apuntarle y dirigió el arma a su sien derecha.
  -       No puedo soportarlo más Evelyne, ¡No tolero más esta situación!
  -      ¡No digas eso mi Alfred, aún podemos seguir adelante! – Gritó nerviosa.
  -      ¡Es imposible!, nuestra vida se vino abajo, ¡no soporto más este tormento! – Dicho esto, desbloqueó el seguro de la pistola. Evelyne se lazó hacia él y juntos cayeron al suelo. Un fuerte disparo se escuchó y una bala quedó incrustada en la pared de la habitación. Aprovechando la distracción, la mujer trató de quitarle el arma a su marido, sin embargo, este consiguió apartarla de sí, se puso de pie y volvió a colocar la pistola en su sien.
  -      ¡No entiendo por qué lo haces!, Sé que te he hecho mucho daño, sé que he cometido muchos errores, ¡PERO NO QUIERO QUE POR MÍ DECIDAS TERMINAR CON TU VIDA! – Le dijo en un tono de desesperación Evelyne.
  -        Tú no eres la culpable, mi decisión no tiene que ver con lo que hiciste o dejaste de hacer. Todo lo perdoné, todo fue olvidado Evelyne – Alfred sonrió a su esposa indicando absolución a sus errores – No te guardo ningún rencor.
Ella sintió alivio en su ser por unos instantes, su cuerpo se invadió de una cálida sensación, estaba absuelta, sentía amor, libertad. Sin embargo, el miedo hizo que esa sensación la abandonara rápidamente; su esposo aún quería terminar con su vida, y ella, no podía permitirlo.
 -          Alfred, por favor razona, ¡No comprendo por qué insistes en terminar así!...Aún podemos buscar solución – No quería hacer movimientos bruscos que ocasionaran que el gatillo se accionara de nuevo. Él la miro aún sonriente, cerró sus ojos y susurró – Te amo.

   Tras oírse un fuerte estruendo, el cuerpo de Alfred cayó, chocando contra el suelo y salpicando sangre en la alfombra. La bala había quedado incrustada en su cráneo, quitándole la vida casi inmediatamente. Evelyne lanzó un fuerte grito de tristeza, abrazó al cuerpo sin vida de su esposo y exclamó - ¡POR QUÉ ALFRED!, ¡NO! – Perdió totalmente el equilibrio y sintió que la habitación volvía a girar. Arrastrándose tomó el arma de su esposo, la metió en su boca y, recordando las palabras de Alfred “No te guardo ningún rencor” apretó el gatillo. La bala atravesó su nuca… Y Evelyne, la mujer que un año atrás se jactaba de tener una gran familia y una vida perfecta, caía sin vida en el suelo, sin nadie que la llorase, sin esperanza, con la ilusión destruida.


Para el Lector:

Para el Lector:
Antes de empezar con la novela, considero relevante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
  •           La historia maneja cinco líneas temporales diferentes: 1) Línea temporal de Evelyne, 2) Línea temporal de Fred, 3) Línea temporal de Nardi, 4) Línea temporal de Ricardo. 5) Línea temporal del Caballo de Ajedrez. Al principio de cada capítulo se aclara qué línea temporal estoy por abordar. Debido a esta situación, es importante que el lector tenga en cuenta las fechas que van apareciendo en cada capítulo (al principio), puesto que algunas líneas se juntan en el transcurso de la historia.
  •          La ciudad (O ciudades) en las que se lleve a cabo la novela, está a merced de la imaginación del Lector, por ese motivo no ahondo en la descripción de la misma ni indico alguna ubicación geográfica.
  •           Cada personaje puede influir, no sólo en su línea temporal, sino es posible que llegue a afectar en las otras. Por ese motivo es necesario tener una especial atención a los nombres, ningún personaje comparte el mismo nombre con otro, a excepción de algunos de los principales, que serán diferenciados o por un sobrenombre o por el contexto en el que aparezcan.
  •          Los eventos que ocurran antes o en el futuro a la fecha en la que está la línea temporal, serán llamados al principio del capítulo como “Evento pasado” o “Evento futuro” de acuerdo a la situación. Por ejemplo, si la línea temporal de Evelyne va, según la historia en Febrero de 2003, pero es necesario incluir un episodio de Diciembre de 2002, al principio del capítulo aparecerá lo siguiente “Línea temporal de Evelyne (Evento pasado)”. Esta aclaración se hará más evidente cuando el Lector haya avanzado en la novela.
  •           ¡Espero que disfrute leyendo esta historia, tanto como yo disfruté escribiéndola!





Escrito por Santiago Galeano Carrillo.